lunes, noviembre 10, 2014

Se lo cree Granero, nos los creemos todos

La felicidad es txuri urdin. La tristeza, de Griezmann.
Paolo Futre, ex jugador del Atlético de Madrid que en los últimos tiempos se ha significado por pegar gritos de hooligan en las retransmisiones de Televisión Española de partidos de su antiguo equipo o por acudir a un partido con el Frente Atlético con su bufanda al cuello, publica hoy un artículo en el diario Marca. En él, bajo el título Granero, no te lo crees ni tú, arremete contra el realista por las declaraciones que hizo el pasado viernes sobre la decisión de Griezmann de dejar la Real para fichar por el Atlético de Madrid. Para empezar, el portugués hace mal su trabajo al escribir su opinión sin corroborar lo que realmente dijo Granero, aludiendo no se sabe muy bien por qué a que las palabras  del realista puedan estar sacadas de contexto. Y para seguir, es evidente que Futre no entiende nada de lo que supone el fútbol, por mucho que se haya dedicado durante tantos años a practicar este deporte. Pero vayamos por partes.

La Real publica los vídeos de todas las ruedas de prensa, y la explicación de Granero se encuentra aquí, a partir del minuto 5.36. Esta es la transcripción de sus palabras sobre Griezmann: "Él tomó una decisión, él piensa que cambiar la Real Sociedad por el Atlético es un salto de calidad y en eso no estoy de acuerdo. (...) No, para mí no es un salto de calidad, pero entiendo que para él lo sea o que para algún otro jugador lo sea. Yo he jugado en el Real Madrid y tú me dirás que el Real Madrid es más grande que el Atlético de Madrid. Después del Real Madrid he jugado en otros equipos y he jugado en la Real y yo no siento que en este club estoy por debajo de cualquier otro club en el que he jugado. No sólo sólo es cuestión de ser campeón de Liga, subcampeón de Europa o tal, sino una cuestión de principios, de identidad o de valores de club. Y, obviamente, en ese sentido respeto a Antoine, que es un buen compañero, un amigo y un gran jugador, y le deseo lo mejor como te digo. Pero digo que no comparto la opinión de que pasar de la Real Sociedad al Atlético de Madrid sea un salto de calidad, ni mucho menos".

No hay equívoco posible. No son palabras sacadas de contexto. Son sencillamente, la expresión de que lo que piensa Granero y, por mucho que pueda sorprender a Futre, de lo que pensamos muchos. Sin duda, todos los que estaban presentes en Anoeta y recibieron a Griezmann con silbidos, que no fueron pocos. Y, en realidad, es lo que pensamos casi todos los que sentimos los colores de la Real. No se trata de negar evidencias y la más clara de todas es que, ahora mismo, el Atlético de Madrid es campeón de Liga, subcampeón de Europa y, por tanto, un equipo por encima de la Real en los parámetros futbolísticos que queramos analizar. Pero sorprende que un tipo tan abiertamente pasional como Futre no entienda lo que dice Granero. Si Diego Costa hubiera fichado por el Real Madrid, ¿él lo habría considerado como un salto de calidad? Probablemente no, ¿verdad? El portugués seguramente habría apelado entonces al sentimiento atlético, a la identidad de su equipo. Pero responde como un hooligan y no como alguien que merezca un espacio en los medios. Por eso la prensa vive en el desprestigio que vive ahora mismo, claro.

Contestar a Futre es seguramente una pérdida de tiempo. Granero habló con sosiego y Futre entró al trapo. La victoria de la Real habrá conseguido que este artículo del antiguo astro portugués tenga un tono mucho menos dañino del que sin duda habría tenido en caso de haber sacado el Atlético los tres puntos de Anoeta. Pero en todo caso, y sin que estas líneas sean un intento de sacar partido de esa victoria txuri urdin, viene muy al caso responder a Futre. Granero, que por cierto hizo un espléndido partido, puso palabras a un sentimiento, no a una estadística. La Real es especial. No es grande por sus títulos, que los tiene, ni por sus marcas futbolísticas, que también las luce con orgullo. La Real es mucho más que eso. La Real es grande en sus miserias y en sus proezas. Es única por su identidad, por sus valores, por su forma de ser, por su cantera, por su afición. Hay mil instantes, mil historias, mil jugadores, mil partidos por los que cualquiera que luzca el escudo de la Real puede sentir un orgullo infinito. Granero lo ha entendido. Futre no. O no ha querido entenderlo por un muy mal expresado orgullo para con su propio equipo. Así de simple.

Que Futre haya saltado así ante las palabras de Granero brinda una oportunidad extraordinaria para, eso sí, pegar un merecido palo a los nuestros por su tibieza. Sorprende que tengan que venir de fuera para entender tan bien la Real cuando algunos de los de aquí parece que la defienden de una forma mucho más timorata. Granero ha dado el último ejemplo, pero los hay recientes. Canales, precisamente con la marcha de Griezmann, despidió a Antoine en Twiiter diciéndole que "por lo menos ya sabe que hay dos partidos que no va a ganar". Y por seguir con el ejemplo del Atlético de Madrid, permanece en el recuerdo la defensa que hizo Bernd Krauss cuando el equipo madrileño quiso mover ficha por Kovacevic en la temporada 1998-1999, amparándose en una cláusula que entonces se dijo que había en el contrato del delantero y que le daba facilidades para salir si era a un equipo de una selecta lista de clubes europeos, como la Juventus, al que finalmente se marchó. "El Atlético no es un grande", sentenció Krauss cuando se le preguntó por este tema.

No lo es, además, en el sentido que quienes pasan por la Real han de darle a este club. No se puede demostrar más cariño que el que sintieron en Anoeta Illarramendi, Bravo y Griezmann. Y por los baremos que exhibe Futre no hay obviamente en España tres equipos más grandes que Real Madrid, Barcelona y Atlético. Pero los tres han perdido mucho marchándose de la Real, y así es como lo siente Granero, como lo siente quien firma estas líneas y como lo siente mucha gente más. Quienes hemos nacido con el gen txuri urdin no podemos menos que agradecer a Granero no ya sus palabras sino su sentimiento, porque recuerda que el fútbol es mucho más que el dinero que mueve. Pero a veces queda esa espina clavada de que dé la impresión de que precisamente quien es realista desde la cuna se conforme con que las estrellas que juegan en la Real tengan que marcharse a un grande para dar ese salto de calidad. Se equivocan, porque quien llega a jugar en la Real ya sólo puede dar un salto de calidad: hacer más grande a la Real. Todo lo demás es parte del negocio del fútbol en el que tantas leyendas txuri urdin no quisieron entrar nunca. Y recordarlo de vez en cuando no está nada mal.

5 comentarios:

Pato Reizabal dijo...

Hola, Juan. Me lo ha mandado mi hija Maite, que vio en Bélgica nuestra gran victoria. Está fantástico. Muchas gracias por expresar nuestro compartido sentir en tan certeras palabras. Aupa la Real

Pato, un corazón txuriudiñ.

Antonio R. dijo...

Bueno...Futre nunca se distinguio por ser muy inteligente. La culpa la tienen quienes le dan una plumilla y encima este se lo cree.

jose alberto dijo...

Con todo el respeto del mundo y entendiendo la explicación, el representante de Granero lleva tiempo vendiéndolo al atlético, este verano inclusive... Desconozco si el jugador está de acuerdo y si lo dicho aquí es para regalar oídos...

payo yanguas dijo...

Muy acertado Juan.
¿Harás alguna valoración del fichaje de Moyes?

Un abrazo fuerte.

Juan Rodríguez Millán dijo...

Pato, siempre es una delicia leerte y más sabiendo que lo haces a través de tu hija. ¡Saludos a los dos!

Antonio, efectivamente, la culpa es de quienes ceden un espacio profesional a argumentos propios de la tertulia de bar.

José Alberto, desconozco esa información que comentas. Granero no se está mostrando en la Real como un jugador que simplemente habla para regalar oídos, se le ve siempre convencido de lo que dice. Obviamente, la certeza absoluta sólo la tiene él, pero lo que expresó es el sentir de mucha gente que Futre no entiende.

Payo Yanguas, muchas gracias. Acabo de publicar una, desde el punto de vista de Aperribay. Ya me darás tu opinión...