miércoles, junio 28, 2017

La camiseta, un lío inesperado

Así será la equipación de la Real en la 2017-2018.
Dentro de todos los líos en los que se puede meter un club como la Real Sociedad, el aspecto de su camiseta era probablemente el más inesperado. La Real y Adidas han presentado la nueva equipación, la que lucirá el equipo en su regreso a Europa, y si lo que se buscaba era que se hablara de ella desde luego se ha conseguido. Franjas más finas y numerosas que nunca lucen en la zamarra, que cuenta con una espalda completamente azul. La ruptura con la historia de la Real es más que evidente y sorprende que este cambio haya venido de la mano de Adidas, precisamente la marca que vistió al equipo txuri urdin en sus camisetas de referencia, las de la década de los 80, las que cualquier aficionado tiene como emblema claro de cómo debe lucir dicha camiseta.

Hagamos memoria. La Real que ganó la Liga en Gijón en 1981 lo hizo con una camiseta con tres franjas azules. Se mantuvo ese número cuando se alcanzó la Copa del Rey en 1987. Tres y dos laterales coronaban la de la Real que luchó por el campeonato liguero en 2003. Cuatro tuvo la del centenario, la que lució el equipo en su ascenso a Primera en 2010. Y tres lucía la camiseta con la que la Real volvió a la Champions League en 2013. Lo más diferente en ese sentido se puede encontrar en las cinco franjas azules que lució el equipo en la temporada 1990-1991 o a finales de los años 90. La camiseta que lucirá el equipo txuri urdin en la temporada 2017-2018 tiene nada menos que nueve franjas azules en su pecho.

No se puede negar que, por mucho que el cuello redondo nos lleve a otras épocas, el diseño no es precisamente acorde con la historia de la Real. Rompe con ella por completo, de hecho. Y da la impresión de que forma parte de una guerra de marcas deportivas por llamar la atención. Hace muy pocos días, la polémica tuvo lugar en Barcelona con la nueva camiseta del Espanyol. La razón, la opuesta a la que preside el debate en Donostia, puesto que Joma ha diseñado una equipación con una gran franja azul presidiendo el pecho de la camiseta. El club barcelonés contestó a la polémica explicando que habían aumentado las ventas con respecto a las de la pasada temporada en un 37 por ciento.

Habrá que ver cómo responde la afición realista, pero lo que está claro es que la opinión contraria a esta camiseta se ha convertido en la predominante en Internet. En muy pocas horas, una petición publicada en Change.org ha reunido casi 1.700 firmas. La encuesta publicada por la edición de Mundo Deportivo en Gipuzkoa en la noticia sobre la nueva camiseta arroja a última hora de la tarde del miércoles un contundente 73,18 por ciento de votos contrarios a que este sea el aspecto que luzca la Real la próxima temporada. Y pasear por Twitter nos permite encontrar memes que comparan la camiseta con los toldos de la Concha o incluso con camisas de rayas de aspecto no demasiado moderno.

Para gustos, los colores. Pero sorprende que un equipo como la Real sea el que pegue un salto tan drástico hacia la modernidad con algo que sus aficionados valoran tanto, la camiseta. Pocas aficiones acuden tan uniformadas a su estadio como la de la Real. Pocas dan tanto colorido en sus viajes con la txuri urdin como esta. Y arriesgar tanto puede no ser la mejor de las decisiones. Llevamos unos días en los que hemos visto mucha nostalgia, conmemorando el trigésimo aniversario de la Copa de Zaragoza, reviviendo las participaciones europeas antes del regreso a las competiciones continentales. Hemos visto muchas de las camisetas de la Real que más nos han gustado, las que más nos han emocionado, las que conforman nuestros sueños futbolísticos. Y ahora tenemos esto, un lío inesperado que asalta parte de lo más importante que tiene este club, la tradición. No va a ser fácil de asimilar que este sea el aspecto de la Real 2017-2018. Nada fácil.